Si puedes hacer una expedición a la huerta y recoger algunos higos maduros, o los recibiste de regalo y no sabes cómo utilizarlos, o simplemente fuiste a la verdulería y llenaste tu canasta, entonces esta mermelada es una receta imperdible para obtener una confitura casera. Una mermelada muy dulce que no llega a ser empalagosa. Un sabor delicioso, dulce y aromático para el desayuno, para acompañar quesos, rellenar alguna tarteleta o coronar algún helado de crema de vainilla.
Una mermelada que le dará una pincelada de sabor a nuestras tostadas en el desayuno.
Tiempo de preparación: 1 hora más macerado previo
Ingredientes
- 1 kilo de higos maduros
- 700 gr de azúcar
- 1 limón
- 3 cucharadas soperas de oporto
- 1 cucharada sopera de pectina (opcional)
Preparación
- Dejar macerar los higos la noche antes durante 12 horas en el azúcar, limpiándolos y cortándolos en cuartos y mezclándolos con el azúcar en una olla.
- Al día siguiente poner a cocinar a fuego medio 20 minutos junto con el jugo del limón, retirando la espuma que se sube a la superficie. Agregar la pectina espolvoreándola.
- Luego triturar el higo a mano o con la batidora de mano y añadir el oporto cocinando 30 minutos más, retirando siempre la espuma hasta lograr la densidad que se desea y removiendo la preparación para que no se pegue en el fondo de la olla.
- Luego envasar la mermelada en frascos esterilizados (hervidos previamente 30 minutos) bien herméticamente cerrados y puestos boca abajo para que hagan vacío.
¿Por qué usar pectina?
La pectina le da cuerpo a la mermelada, sirve para espesarla y evitar que quede líquida como una jalea. Es una fibra natural que se encuentra en las paredes de los vegetales y se concentra especialmente en la piel de las frutas. Es muy soluble en agua y al unirse con el azúcar forma una especie de gel. Utilizando pectina espesaremos de forma natural nuestra conserva necesitando menos azúcar y menos tiempo de cocción. Es decir que nos permitirá obtener un 50 % más de mermelada con la misma cantidad de fruta, ya que disminuye el tiempo de ebullición.
Para untar nuestras tostadas de pan, cubrir una tarta dulce, y también para ser utilizada en forma excelente en muchas recetas saladas. Esta mermelada puede envasarse en forma de conserva y guardarse durante dos meses en heladera.