En general acostumbramos consumir la salsa de tomates con las pastas, pero también podemos acompañar carnes o cocinar verduras, carnes y pescados en ella. Hay quienes le incorporan preservantes a este tipo de preparaciones, pero en esta receta no es necesario, ya que va cocida y puede conservarse en frascos sellados al vació o bien congelada en bolsas herméticas o potes plásticos.
Tiempo aproximado de preparación: 40 minutos
Rinde: 4 litros
Ingredientes
- 5 kg de tomates
- 5 cucharadas de sal
- 5 ajíes verdes
- 1 pimiento
- 1 hoja de laurel
- 3 cucharadas de azúcar granulada
- 1 cucharada de orégano
- 1 pizca de canela
Preparación
Lave los tomates, pártalos en cuatro y cocínelos sin agua en una olla, revuelva constantemente para que no se peguen.
Mientras tanto, corte los ajíes y saque las semillas, haga lo mismo con el pimiento, y agréguelos a los tomates. Una vez cocidos los ingredientes, cuélelos para sacar el líquido, reserve. Páselos por cedazo y ponga de nuevo en la olla, junto a todos los demás ingredientes.
Deje cocinar por 20 minutos, revolviendo de vez en cuando. Si está muy espesa, agregue un poco del líquido que reservó, no mucho. Retire la hoja de laurel.
Para conservar, vacíe directamente de la olla mientras la salsa está caliente en frascos conserveros, tápelos y déjelos enfriar boca abajo para que se sellen.