Uno de los platos más populares de la gastronomía de Perú es sin duda, el ají de gallina. Originario de este país, consiste en una crema espesa que se compone de carne de gallina bien cocida y después desmenuzada, que junto con la mezcla de otros ingredientes, le otorgan un sabor único y delicioso.
Es bastante habitual reemplazar la carne de gallina por carne de pollo, y aunque el resultado también es muy sabroso, no es como el inicial.
También en algunos lugares lo cocinan con ingredientes diferentes a los de la receta originaria e incluso añaden algunos nuevos como puede ser queso parmesano, como en la receta que vamos a preparar hoy.
En cualquier caso en esta ocasión vamos a aprender a preparar un riquísimo ají de gallina de una manera sencilla y rápida con su gallina desmenuzada, sus papas, su huevo duro y su salsa bien espesa y que se puede degustar tanto caliente como frío. ¡Descubre cómo se hace!
Ingredientes (para dos personas)
- 1 pechuga de gallina entera y con hueso (o de pollo)
- 3 ajíes amarillos
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 1/2 taza de leche evaporada
- 2 nueces
- 2 rebanadas de pan de molde
- 2 cucharadas de queso parmesano
- Sal y pimienta
- 2 patatas cortadas en rodajas
- Aceitunas negras
- 1 huevo cocido
Preparación
Lo primero que hay que hacer es cocer en una olla con agua solamente, la pechuga entera de la gallina o del pollo. Cuando esté preparada, reservamos el caldo y dejamos que se enfríe la carne para posteriormente desmenuzarla y reservarla.
Al ají amarillo se le quitan las semillas y cualquier hebra que tenga y con un poco de caldo de la cocción de la pechuga, se hace una pasta hasta conseguir una textura lo más cremosa posible. Se reserva. Mientras tanto se machacan las nueces en un mortero y también se reservan. Con las manos se parte en trozos muy pequeños el pan y lo reservamos.
En una sartén lo bastante profunda se sofríe la cebolla y el ajo bien picados ambos ingredientes. Cuando la cebolla esté transparente se añade la pasta de ají, un poco de sal y de pimienta y se mezcla todo bien.
En otro recipiente se introduce el pan con un poco de caldo de gallina hasta conseguir una pasta espesa a la que se añade también el pan. El resultado se incorpora a la sartén y se revuelve todo muy bien. Se agregan las nueces molidas y la pechuga del animal elegido. Se añade una taza de caldo y se deja cocinar durante un rato a fuego lento. Transcurridos cinco minutos aproximadamente, se añade el queso parmesano y se deja otros cinco minutos más cocinando.
Si ha espesado demasiado se puede añadir un poco más de caldo, y si por el contrario se ha quedado aguado, se puede agregar más cantidad de queso.
Cuando hayan pasado diez minutos desde que se bajó la temperatura del fuego, se retira la sartén del mismo y se añade la leche evaporada para remover todo perfectamente. A la hora de servirlo se puede acompañar con un poco de arroz blanco y sobre una capa de patatas cocidas, colocar el ají para decorarlo con el huevo cocido o sancochado y unas aceitunas negras.