Este pastel salado es especial para quienes están cuidando su figura o no son amantes de las carnes. Es en base a semolín y vegetales. Un plato rico en nutrientes y sabores.
Tiempo estimado de preparación: 45 minutos
Este plato rinde para 4 personas
Ingredientes
- 300 gramos de semolín
- ¾ de leche
- 300 gramos de espinaca
- 250 gramos de zanahorias
- 250 gramos de arvejas
- Queso rallado
- Una cebolla
- Una cucharada de pulpa de tomate
- Vino blanco
- Un diente de ajo
- Manteca
- Caldo
- Sal
Preparación
Volcar en una olla grande la leche con medio litro de agua y dejar que hierva; salar e incorporar el semolín en forma de lluvia para evitar grumos. Cocinarlo revolviendo siempre por 15 minutos.
Saltear la espinaca con apenas manteca y el ajo pelado. Limpiar la zanahoria y cortarla en juliana. Rehogarlas en un sartén con manteca, agregar la sal y el vino blanco. Cocinar durante 10 minutos.
Pelar y cortar la cebolla, rehogarla en manteca en otra sartén. Unir con las arvejas, salar y rociar con vino. Agregar el tomate y cocinar por 10 minutos más.
En mantecar un molde de 24 centímetros de diámetro con los bordes altos. Colocar una cuarta parte del semolín y nivelarlo bien. Acomodar por encima las espinacas y espolvorear con queso rallado. Cubrir con otro cuarto de semolín y colocar por encima las arvejas, rociar con queso rallado. Cubrir con otro cuarto de semolín y sobre este las zanahorias y mas queso rallado. Cubrir con el semolín restante y espolvorear con mucho queso rallado y cuadraditos de manteca.
Cocinar en horno a 180 grados centígrados por media hora.